El despertar ecléctico de Miguel Gil

El despertar ecléctico de Miguel Gil

Álbum: Despertares

Autor: Miguel Gil

Producción: Miguel Gil

Género: flamenco, pop, jazz, funk

Fecha de publicación: 28/07/2023

Número de canciones: 13

PVP: 15€

Hay libros que merecen relecturas y discos que merecen re-escuchas, porque en la primera toma de contacto uno se queda con la sensación de no haber percibido todos los matices, de que todavía faltan pequeños y valiosos elementos por desentrañar. Ese es el caso de Despertares (2023), el nuevo álbum del guitarrista y productor musical Miguel Gil. Hace apenas unos días que salió a la luz, después de más de un año de trabajo (ya lo podéis adquirir en: https://miguelgil1.bandcamp.com/album/despertares), y hoy le dedicamos esta reseña para ver si logramos esclarecer algunas de las complejidades que encierra este maravilloso disco.

Miguel Gil nació en Tarragona, en 1993. Con once años ya se le podía ver pegado a una guitarra, ensayando sin descanso, absorbido al principio (como la mayoría de los guitarristas nóveles) por la energía del rock, aunque sus intereses no se detuvieron ahí. Tras varios años de intenso estudio, comenzó a impartir clases y conciertos, hasta que a los diecisiete se trasladó a Barcelona para instruirse en L’Aula de Música Moderna i Jazz. Poco después viajaría hasta Inglaterra para seguir formándose en The Academy of Contemporany Music de Guildford, y luego de vuelta a España para aprender guitarra flamenca con los mejores maestros de Barcelona, Jerez y Madrid.

Ya instalado en la capital, comenzó a trabajar como acompañante y arreglista para músicos de renombre como Antonio José, Pablo López o Antonio Orozco, a la vez que daba clases en distintas escuelas y colaboraba con bandas y proyectos como los de Ely López, Deborah Ayo o Patáx. Sin embargo, el ambiente urbanita —tan asfixiante y precipitado— no debía ir demasiado con él, porque desde hace un tiempo está viviendo en Calamocha, un pueblo de Teruel donde se respira la tranquilidad necesaria para despertar el espíritu creativo. Allí se ha ido modelando su propio home studio, donde trabaja como productor, profesor y músico de sesión (aunque sigue viajando para dar masterclass y participar en diversas propuestas musicales).

Esta profusión de conocimientos e influencias queda plasmada en Despertares, su primer disco, donde combina recursos venidos del pop, el flamenco, el funk, el jazz, el rock e incluso la música electrónica. Y es que no es un álbum fácilmente clasificable, pues pronto vienen eclécticas sonoridades de distintas partes del mundo. Sonidos que aparecen y desaparecen, que se atisban y se entrecruzan sin llegar a evidenciarse del todo, lo cual muestra la gran versatilidad del artista a la hora de asimilar y combinar la riqueza de las World Music.

Esa caleidoscópica heterogeneidad puede verse en temas como «Vetiver», que hace referencia a una planta nativa de la India, la cual inspira esos cantos de aire sefardí con los que se inicia la canción, tras lo cual se abre paso un groove en el que parece ensamblarse un sonido de sitar para completar la estética oriental. También en «Himba» (nombre de una etnia del norte de Namibia) se adivina ese cosmopolitismo, aunque esta vez asociado a sonoridades africanas que permanecen latentes en las melodías vocales.

En cambio, basta ir a temas como «Pain Cave» para descubrir unos ritmos de lo más funky, con slaps y enérgicos rasgueos en la guitarra. Pero sobre estos recursos más reconocibles se superponen polirritmias, fraseos jazzísticos, complejos arreglos que difuminan la escena y generan un ambiente mestizo y maleable, donde se hace difícil determinar si la música se acerca a tal o cual género o solo pretende evocarlo. Lo mismo ocurre en «De Lucía», una pieza en homenaje al desaparecido maestro de la guitarra que se supondría puramente flamenca, pero que pronto escapa a cualquier catalogación para llevarnos por nuevos e insospechados caminos.

Como vemos, este disco mezcla una gran cantidad de timbres e instrumentos, pues cuenta con la colaboración de artistas internacionales como Wes Watkins (batería), J. M. Popo (bajo), Miron Rafajlovic (trompeta), Alberto Enguita (saxo), Seirgio Jackson (voz) o Shayan Fathi (mezcla y máster), entre otros muchos. Aunque los temas han sido enteramente compuestos por Miguel Gil, a excepción de la ayuda del trombonista Roberto Pacheco en determinados arreglos. Y todo —o casi todo, algún viaje ha debido hacer a estudios madrileños para grabar la batería y los vientos— realizado en su home studio gracias a la facilidad que otorgan los nuevos medios para grabar desde casa, trabajar a distancia y enviar los resultados a través de Internet.

Despertares no es un disco del que se deban esperar melodías cantables ni demasiado reconocibles, su música no es para tararear en los ratos muertos, mientras se espera el autobús. Al contrario, es un álbum que requiere una escucha paciente, un oído atento, un interés por el detalle. Lo cual no quiere decir que no pueda disfrutarse en momentos ociosos, ya que los temas tienen un aire muy ambient que destila positividad y distensión. Pero los grooves que se solapan, los ritmos que se atraviesan, las melodías que se alternan, como si cada instrumento improvisara libremente y todo conjugara por un azar asombroso, hacen de esta obra una maravilla del arreglo y la producción musical que requiere más de una escucha para reparar en todos sus pormenores.

Es como sentarse en mitad de un campo (un campo calamochino, de esos que tanto gustan a Miguel Gil) y pararse a diferenciar el fluir del río del soplo entre los árboles, del rascar de las cigarras, del trinar de los pájaros… Tal vez de ahí le venga la inspiración, el despertar que ha dado vida a su álbum. Y si no me creéis, tan solo sentaos un momento a escuchar el tono evocador de «Forgotten Land». 

Héctor Montón Julve

El despertar ecléctico de Miguel Gil

Cómo citar este artículo: MONTÓN JULVE, HÉCTOR (2023). «El despertar ecléctico de Miguel Gil. Numinis Revista de Filosofía, Época I, Año 1, 2022, (RM30). ISSN ed. electrónica: 2952-4105.

Esta revista está bajo una licencia de Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional